Ir al dentista con los más pequeños por primera vez puede generar una gran cantidad de dudas en los padres como, ¿a qué dentista acudir? ¿a qué edad se debe comenzar a ir al dentista? o, la que hoy nos ocupa: ¿debo acompañar a mi hijo dentro del gabinete o debería esperar en la sala de espera?
Cuando los padres acuden con sus hijos al dentista, muchas veces no saben si deberían acompañar al niño hasta el interior del gabinete dental o esperarles fuera hasta que termine su revisión o tratamiento.
Por lo general, la mayoría de los padres quieren estar presentes durante la consulta de sus hijos, sin embargo, esto no es siempre lo más recomendable, aunque dependerá mucho de cada situación. Por este motivo, desde Belladent Bonanova Dental, queremos contaros algunas de las razones por las que podría ser positivo para los más pequeños entrar solos a su consulta dental.
¿Debo acompañar a mi hijo dentro del dentista?
Cabe resaltar, que siempre será una decisión de los padres acompañar a sus hijos durante la visita al dentista y, en algunos casos, puede ser recomendable si, por ejemplo, el niño se va a sentir muy inseguro en el gabinete.
Por este motivo, lo que es siempre más recomendable es que en las primeras visitas el padre o la madre entre con el niño para que esa primera toma de contacto sea positiva y el niño se sienta más cómodo y seguro. Tras estas primeras visitas, cuando el dentista y el niño ya se conocen bien y tienen una mayor confianza, pueden empezar a entrar solos sin problema.
De este modo, cuando el niño se encuentra solo en el gabinete con el dentista se produce un vínculo mayor entre ambos que cuando están presentes los progenitores. Tanto es así que, incluso, en la gran mayoría de las ocasiones, el niño se porta mucho mejor y obedece más a las recomendaciones del dentista cuando los padres no están presentes.
Como decíamos anteriormente, esto siempre es opcional. Por ejemplo, si se trata de un niño que tiene unas necesidades especiales, puede acordarse la presencia de los padres en el gabinete sin que haya un mayor problema.
Por otro lado, algo que hay que tener muy en cuenta es que los dentistas especializados en niños (odontopediatras) tienen a su disposición todos los recursos necesarios para que los más pequeños se sientan cómodos en la consulta y pasen un rato agradable y divertido. Así, dejarles que entren solos les hará ver que no hay nada que temer, y que pueden sentirse seguros y relajados, ganando confianza en sí mismos y sintiéndose mucho más valientes.
Por lo tanto, en resumen, podríamos decir que entrar en el dentista solo, puede reportar a los más pequeños ventajas como:
– Una mayor seguridad en sí mismos.
– Un vínculo más fuerte con el dentista.
– Un mejor comportamiento.
– Perder el miedo al dentista.
– Mayor independencia y confianza.
Si quieres más información sobre dentistas infantiles o sobre cualquiera de los tratamientos que realizamos en nuestra clínica, ponte en contacto con nuestros especialistas, estaremos encantados de ayudarte a resolver todas tus dudas.